Huaquechula celebra la Asunción de María con sus tradicionales alfombras de fruta y aserrín
En el marco de la celebración de la Asunción de María, el municipio de Huaquechula ha desplegado su colorida y tradicional alfombra de fruta y aserrín en varias ubicaciones clave, como parte de las festividades que conmemoran el tránsito de la Virgen María, celebrado el 15 de agosto.
En la capilla de San José, voluntarios y encargados han elaborado una alfombra de poco más de tres metros de largo que embellece la imagen de la Virgen María con frutas y arreglos florales, representando el Corazón de Jesús, una cruz y una flor. Este homenaje es una de las muchas muestras de devoción y arte que caracterizan las festividades en Huaquechula.
En el ex convento de San Francisco, se ha instalado una alfombra aún más impresionante, con dimensiones que superan los 20 metros cuadrados. Esta alfombra, elaborada completamente con semillas y frutas, presenta colores oscuros como café y negro, utilizando cerca de una tonelada de semillas aportadas por la comunidad. Las imágenes reflejan paisajes marianos y la alfombra permanecerá expuesta hasta finales de mes.
La Parroquia de San Martín Obispo también ha contribuido con una alfombra de más de cinco metros de largo, decorada en vibrantes colores rojo, rosa, amarillo y azul. Este diseño emplea semillas de alubia, frijol negro, calabaza, arroz, chía, así como frutas como plátanos, mango, uvas, granadas, melón y manzanas.
Silverio Reyes, Director de Turismo en Huaquechula, explicó que esta tradición tiene alrededor de 400 años y se remonta a la época colonial. Las alfombras no solo son una ofrenda para pedir buenas cosechas y prosperidad agrícola, sino también una forma de preservar y celebrar las tradiciones religiosas locales.
Estas alfombras, colocadas en distintas iglesias de Huaquechula, son un símbolo vibrante del arraigo cultural y la devoción de la comunidad, reflejando una rica herencia que sigue viva en la región.